lunes, noviembre 02, 2009

Mala cosa

Un gobernante que inspira poca o ninguna confianza al 72,3% de los encuestados suele ser alguien con una carrera política acabada. Salvo que tenga enfrente a un líder de la oposición que inspira poca o ninguna confianza al 80,2% de los encuestados.
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Guillermo Dupuy
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2 comentarios:

Natalia Pastor dijo...

El problema del PP es que no tiene programa, ni ideario, ni líder, y se han ido dejado los principios en la gatera, en ese intento marianista de buscar el "centro", esa entelequia insulsa, ese cajón de sastre, ese pantalón gris que va bien con todas las chaquetas.

En ese giro de Rajoy hacia la nada, hacia ese "marianismo" light bajo en calorias que no traspasa ni mancha, se han ido quedando cadáveres en el camino:Zaplana, Acebes,María San Gil, Ortega Lara, Daniel Sirera,...

De esos polvos vienen estos lodos.
Por que Rajoy ha decidido que una oposición real,contundente, no conduce a nada y ha asimilado la doctrina zapateril de un PP silente,"pa ayudá" y arrimar el hombro, en vez de un lider fiscalizador.
Rajoy cree que va a heredar la Moncloa y que los cinco millones de parados lo llevarán en hombros,y se equivoca gravemente.
Hoy por hoy,la única salida a esta ceremonia de la confusión, es la celebración de un congreso extraordinario donde se pueda presentar quien quiera, sin ataduras de avales ni conspiraciones,chanchullos y politiqueos de callejón.

Que sean las bases,los militantes, quienes decidan quien quieren que sea su presidente y candidato a las elecciones de 2012,
Si no es así, el navajeo,las intrigas de alcantarilla continuarán de manera inevitable.

Oroel dijo...

¿Acaso crees que esta crisis se ha cerrado en falso, tal como creemos muchos? En el congreso de Valencia más de uno se debió atrever a dar el paso. Y no lo dió. Una pena, porque a algunos nos pareció que también se cerraba en falso.

Habrá alternativa a Rodríguez, pero cuando sea demasiado tarde.


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